- Evitar la amenaza de virus avanzados o ransomware.
- Proteger las redes ante intentos de intrusión o robo de datos.
- Respaldar datos y documentos ante contingencias o pérdidas de servicio por incidencias de cualquier origen.
• Mayor seguridad de los datos.
• Mejor control de acceso.
• Protección de la infraestructura de red.
• Cumplimiento de los requisitos legales.
• Confianza de los clientes.
• Mayor productividad del equipo.
• Controlar el riesgo de pérdidas financieras.
• Cuidado de la reputación.
• Recuperación de la operación.
• Mejor conciencia de la seguridad.